

El piel a piel no fue lo mismo, ni el beso tibio fue uno de los tuyos… imploré porque dejaras de existir en mis recuerdos y no pude evitar derramar esa lágrima que aun te necesita.
¿Cuanto debo esperar? Hechos marcaron esa sensación de éxtasis corporal y no dejan de pedir aunque tú ya no estás.
…si tus manos elevasen una plegaria rogaría que ellas en mi cuerpo se deslizasen… tembloroso suplicar porque tú estés aquí y anhelo magistral para robarte un beso antes de oir palabras hacia mi.
Corazonadas, palpitaciones, sensaciones y fantástico mundo de sonrisas vuelan por tu causa y
colorido es mi andar por las calles aunque no estés junto a mi… oh! Benditos estos días que me vieron renacer por tus gestos de hombre ideal!...

Me gusta, hace un recorrido por los pensamientos metafísicos acerca del amor y la ausencia.
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